jueves, 1 de enero de 2009

BOTELLA AL MAR Nº 43.DOÑA ROSA Y EL LORO DE DOÑA CATA

BOTELLA AL MAR DE LA DESINFORMACIÓN Y LA INCOMUNICACIÓN CON QUE NOS ATACAN LOS MEDIOS MASIVOS DE CONFUSIÓN GENERAL.
SABIOS PERROS DE DON JOAQUÍN (QUE DEBE SER SABINA) QUE ANDAN POR EL MUNDO... UNÍOS!!
Reflexiones que escribió Roberto Navarro en Página 12 (http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/17-3732-2008-12-31.html) que aquí les dejo. Al final una fábula sin moraleja que remata estas palabras.
Que desastre, como está el país! estamos condenados: encima de la crisis internacional, tenemos un gobierno que hace todo lo contrario de lo que hace falta - se lamentaba el martes pasado una señora que hacia una cola de mas de 50 metros para comprar un regalo de nochebuena en una negocio de un shopping de la zona norte.
Dicen que somos los que peor nos va en Latinoamérica - le contesto su compañera de compras, que cargaba dos bolsas que apenas podía sostener, repletas de juguetes, prendas y otros obsequios navideños.

La contradicción entre sus opiniones y el tumulto de gente que se sumaba a la cola de la tienda se completaba con los estacionamientos del centro de compras completos; los apretujonoes de los compradores en los pasillos y al otro día; las cifras de la Cámara de Centros de Compras, que señalaban un crecimiento en las ventas del 25 por ciento con respecto al año anterior.
¿Quien convence a la clase media argentina de que el país esta muy mal, y lo que es peor, marcha hacia la ruina?

Se trata de un grupo de economistas mediáticos, profetas de la catástrofe, los mismos que en 2002 decían que el dólar iba a llegar a 20 pesos y que la economía marchaba inexorablemente hacia la hiperinflación. Luego, ante la evidencia de que la debacle no sucedería, comenzaron a afirmar que el crecimiento económico era solo un " veranito", una forma de decir que no duraría mas de tres meses.

Al año, hablaban de un rebote técnico. Miguel Angel Borda, Daniel Artana, Jose Luis Epert, Roberto Cachanosky, Ricardo Lopez Murphy y Guillemor Mondino (Lemman brothers) son algunos de los Nostredamus modernos que lejos de amedrentarse ante sus sucesivos yerros, ahora pronostican que se viene una profunda recesión, seguida de desempleo generalizado, como si esto fuera poco, un nuevo default.

Los "econochantas" no podrían seguir pregonando sus oscuros augurios si no contaran con la complicidad de gran parte de los medios y del poder económico que vuelven a consultarlos una y otra vez. La fenomenal crisis financiera internacional de un sistema basado en sus ideas neoliberales no solo no los convence de realizar una mínima autocrítica.
Su discurso actual es que los problemas argentinos "tienen mas que ver con los errores del Gobierno" que con la tormenta que viene del Norte.
¿Porque lo hacen? Su deseo es conseguir una profecía autocumplida, minando las expectativas sociales para que se gaste menos, se invierta menos y asi finalmente caer en la debacle que anunciaron.
Por estos y otros motivos mas, es para creer que el 2009 puede ser un buen año!!!

basta de nostramierdamus y econochantas que trabajan de opositores. Para ellos va:
EL LORO DE DOÑA CATA

EL perro de don Joaquín pasaba varias veces al día bajo la ventana donde el loro de doña Cata lucía su vistoso plumaje y ejercitaba su voz aguardentosa.
La verdad es que no abundan por estas tierras los loros que se ocupen de política. Pero de tanto oír la radio, el loro de doña Cata había aprendido la frasecita que repetía por lo menos cien veces por hora: “Los comunistas se llevarán todos los loros a Moscú”:
El perro de don Joaquín era un can bastante lúcido, acaso debido a que su amo no tenía radio ni televisión. De ahí que lamentara haber escuchado ese repetitivo comentario lórico. Pero sabía que era inútil discutir con el loro, y por eso se alejaba con el rabo entre las patas.

Cierta mañana doña Cata se despertó mal del hígado y sin que el loro hubiera abierto siquiera el pico, le tiró desde lejos un pesado almohadón que dejó al ave psitaciforme muy dolorida y sin habla durante dos horas y media.
A la tarde, cuál no sería el estupor del perro de don Joaquín cuando, al pasar como de costumbre bajo la ventana de doña Cata, advirtió que el loro había cambiado el texto de su oratorio.
Ahora decía: “Loros del mundo, uníos”.

Entonces, el perro de don Joaquín ladró despacito, simplemente a modo de comentario y se alejó con paso alegre, mientras pensaba y repensaba: “Este debe ser el primer caso de concientización de loro”.